Por lo general, una sala limpia se construye para crear un entorno donde la contención de partículas contaminantes se mantiene a un nivel bajo. Es ampliamente aplicable en todos los procesos industriales donde se requiere erradicar el impacto de partículas pequeñas, como en dispositivos médicos, biotecnología, alimentos y bebidas, investigación científica, etc.
Para lograr este propósito, la sala blanca debe ser un espacio confinado con factores como la temperatura, la humedad y la presión bajo estricto control. Generalmente, se requiere que la presión de la sala aislada se mantenga por encima o por debajo de la presión ambiental circundante, lo que puede denominarse sala de presión positiva o sala de presión negativa, respectivamente.
En una sala limpia con presión positiva, se impide la entrada de aire ambiental, mientras que el aire del interior puede escapar libremente. El proceso se controla mediante ventiladores o filtros que impulsan aire limpio al espacio debidamente sellado, en lugar de permitir la libre entrada de aire del entorno circundante, lo que previene la intrusión de contaminación ambiental. La presión positiva de aire se utiliza comúnmente en plantas farmacéuticas, quirófanos de hospitales, laboratorios, plantas de fabricación de obleas y otros entornos similares.
Una sala de presión negativa, por el contrario, está diseñada para mantener una presión de aire relativamente baja mediante un sistema de ventilación. Permite la entrada de aire ambiente mientras el aire de la sala se extrae a un punto específico. Este diseño de sala es común en salas de enfermedades infecciosas de hospitales, laboratorios químicos peligrosos y áreas industriales de riesgo para proteger a los pacientes y al personal cercano de la propagación de gases infecciosos o nocivos.
El concepto de diseño de una sala limpia demuestra que el control de la diferencia de presión es crucial para prevenir la contaminación. Por lo tanto, un transmisor de presión diferencial es una herramienta ideal para monitorear la presión tanto dentro como fuera de la sala limpia y comprobar si la discrepancia de presión se mantiene correctamente. En combinación con otros dispositivos de medición de temperatura y humedad, el transmisor permite verificar con precisión la eficacia de la sala limpia.
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Hora de publicación: 11 de julio de 2024